Cuando piensas en un ayuno regular, ¿qué es lo primero en lo que piensas? Lo más probable es que en sufrimiento. Puede que estés pensando que tienes que pasar días sin comer alimentos sólidos y que sólo puedes beber agua. Visualiza esto en su lugar: vas a comer alimentos grasos durante unos días seguidos y poco más. Sigue leyendo si esto te suena bien.

Para entrar en cetosis más rápidamente, muchas personas que hacen dieta ceto engordan rápido. Esto significa que, durante varios días, limitas tus calorías a un máximo de 90% de grasa. En general, tendrás que reducir tus calorías; sin embargo, no sentirás tanta hambre como si hicieras un ayuno de agua porque estarás comiendo grasa, que te mantiene saciado durante más tiempo.


1Favorece la Producción Rápida de Cetonas

Para que tu cuerpo deje de utilizar la glucosa y cambie a la grasa como combustible, tendrás que limitar tu consumo de carbohidratos y calorías. Como no estás alimentando a tu cuerpo con otros nutrientes como los carbohidratos, que el cuerpo podría utilizar como energía, esto hace que tu cuerpo queme grasa. El ayuno graso te anima a reducir tu consumo total de calorías de 1.000 a 1.200 al día.

Esto se suma al consumo de una verdadera dieta rica en grasas durante varios días. Producir cetonas lo más rápidamente posible es la razón por la que se diseñó el ayuno graso. Es el estado metabólico en el que el cuerpo quema más grasa.


2El ayuno de grasas es popular entre quienes hacen dieta ceto

Siguiendo una dieta ceto regular, podrás entrar en cetosis. Una forma más rápida de obtener los mismos resultados es el ayuno de grasa. Cuanto antes entres en cetosis, antes dejarás de quemar glucosa y te convertirás en un quemador de grasa.

Si has llegado a una meseta con tus resultados después de haber estado en ceto durante un tiempo, es realmente beneficioso. Por eso el ayuno de grasas es tan popular entre la gente que sigue el plan de la dieta ceto. Si te has salido de la cetosis o quieres superar la gripe ceto más rápidamente, el ayuno de grasas lo remediará.


3Tiene muchos beneficios para la salud

Perder rápidamente el peso no deseado es el beneficio clave del ayuno de grasa. Tener un déficit calórico pone a tu cuerpo en estado de cetosis, para que pueda quemar grasa como combustible corporal. Aunque se han establecido los beneficios de seguir una dieta baja en carbohidratos y rica en grasas, existen muy pocas investigaciones sobre el ayuno de grasas en particular. Muchas personas que siguen una dieta rica en grasas y baja en carbohidratos han conseguido revertir la diabetes de tipo 2.

En general, comer una dieta rica en grasas tiene muchos beneficios para la salud; sin embargo, hay pocos estudios, o ninguno, que demuestren los efectos de la dieta rápida en grasas. Si los combinas con una alimentación baja en carbohidratos, estos beneficios se multiplicarán. Por ejemplo, los estudios indican que las dietas ricas en grasas favorecen la salud cardiaca, reducen la inflamación, mejoran la función cerebral y mejoran los síntomas de la depresión.


4Inunda tu cuerpo de cetonas

Las cetonas se suministran constantemente al cuerpo cuando estás en ayunas de grasas. Cuando tu cuerpo cambia de glucosa a grasa, notarás que tienes menos fatiga mental y más energía. Mucha gente ha informado de que pierde más peso y le resulta más fácil hacer ejercicio. Una hormona que almacena grasa es la insulina.

La glucosa que no se utiliza se envía a tu tejido adiposo y se almacena en él. Las cetonas, en cambio, no se almacenan como grasa. Se excretan a través del sistema urinario o se utilizan instantáneamente como energía. En otras palabras, no hay energía extra que deba almacenarse en algún lugar para ser utilizada en otro momento.


5Sigue las restricciones calóricas

Cada día, tendrás que mantener tus calorías entre 1.000 y 1.2000 durante el ayuno de grasas. Tu consumo de calorías tiene que contener entre 80% y 90% de grasa, y el otro diez por ciento corresponde a calorías de otros alimentos. Tendrás que asegurarte de que las calorías restantes no contengan más de un cinco por ciento de carbohidratos si sigues la dieta ceto. De este modo te mantendrás en cetosis.

Al inundar tu cuerpo con alimentos que son casi todos grasa, no tardarás en entrar en cetosis por todas las cetonas que tu cuerpo está produciendo rápidamente. Está bien que realices el ayuno de grasas durante un máximo de tres días. Si acabas de empezar, no recomendamos superar este plazo.


6Haz una prueba de ayuno de grasas

Puedes fatigarte y desnutrirte si limitas críticamente tu ingesta calórica durante varios días seguidos. Además, corres el riesgo de perder masa muscular si no ingieres suficientes proteínas. Empezar con un ayuno de dos días es una buena idea porque te permitirá saber cómo reaccionarás antes de ayunar durante periodos más largos.

Tras dos o tres días de ayuno de grasas, tu cuerpo debería empezar a producir suficientes cetonas para permitirte volver a tu dieta ceto habitual. Esta es la fase en la que tus resultados deberían continuar. Te sugerimos que esperes dos semanas antes de volver a ayunar.


7Empieza por repartir las calorías en comidas pequeñas

Tu ayuno de grasa puede empezar cuando reduzcas tus calorías diarias de entre 1.000-1.200. Para ayudarte a sentirte saciado, puedes dividirlas en varias comidas más pequeñas. Para aumentar tu ingesta de antioxidantes y fibra, puedes combinar tus alimentos bajos en carbohidratos y ricos en grasas. Céntrate en el brócoli, las espinacas, la coliflor, la col y la col rizada.

Puedes picar bombas de grasa entre comidas y añadir mantequilla de pasto y aceite MCT a tu café. Mantente alejado de los alimentos que normalmente evitas en una dieta cetogénica, como la leche, las legumbres, los cereales, el pan, el arroz y la mayoría de la fruta, excepto las bayas, los alimentos procesados y las patatas. Estos alimentos no son buenas fuentes de grasa, pero tienen un alto contenido en hidratos de carbono.

En un ayuno de grasas es necesario limitar tu ingesta calórica entre 1.000 y 1.200 durante dos o tres días. En el ayuno de grasas también deberás obtener 80%-90% de tus calorías de las grasas. Cuando las personas que siguen la dieta ceto llegan a un punto muerto en sus resultados de pérdida de peso, la utilizan para superar el bache.

La dieta rápida en grasas pone tu cuerpo en marcha para producir cetonas, lo que te ayuda a entrar en cetosis, donde en lugar de quemar glucosa, quemas grasa como combustible. Si ya sigues la dieta ceto y sabes que estás adaptado a las grasas, te sugerimos que sólo utilices la dieta rápida en grasas. Cambiar tu dieta a lo grande podría causar síntomas no deseados, como problemas digestivos, fatiga y problemas de concentración.

Jasmine Carter

<p>Jasmine is a wellness writer with an intrapersonal perspective on navigating through the world of gluten-free living. Earning her Master&#039;s Degree in Public Health, Jasmine was diagnosed with Celiac Disease shortly after. Using her knowledge and personal experience, she offers a unique viewpoint on health and wellness.</p><p>Jasmine, que se une al equipo de Ultimate Health Guides, está entusiasmada con la idea de informar a los lectores sobre las ventajas de un estilo de vida holístico y sin gluten.</p>

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